Dos microrrelatos

VIAJE DE IDA

 Ese maravilloso viaje que le habían prometido con la esperanza de mitigar su depresión, fue solo de ida.
En el avión le robó el corazón una mujer con acento sureño y mirada oscura que  fue la culpable de   que los días en aquel paraíso fueron los más intensos, los más arriesgados y los mas reales de su vida.
Una semana antes de lo esperado, desconcertados, sus hijos esperaban en el aeropuerto.
-  ¿y mamá?
- Habéis cumplido vuestra promesa, el dichoso viaje le ha cambiado la vida.


EL VIAJE DE LA ABUELA

  Ese maravilloso viaje que le habían prometido nunca llegó y sin embargo la abuela no se cansó de esperarlo.
- Han llamado los del viaje? preguntaba todas las tardes a sus nietos, cuando volvían de la escuela.
- Que no han llamado abuela, y ya van para 4 meses desde que lo ganaste.
- Si ya no van a llamar, abuela, que ya hace 3 años de eso.
- Pero abuela, como van a llamarte si hace mas de 10 años de aquel concurso de la tele.
En su testamento, la abuela Claudia, solo dejo dos cosas en herencia: unos pendientes de oro macizo y 5000 duros que había ido ahorrando para traer regalos a sus nietos de aquel sitio junto al mar que nunca llegó a visitar.



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