Verano 2013. El lujo de disfrutar de las cosas sencillas.

Esta entrada es fundamentalmente para mí, para recordar todo lo que ha sido este ultimo mes y medio, para que cuando acaba 2013 la lea y sepa que aunque no lo parezca, he sido feliz, que eso ya me lo llevo por delante. Si alguien es valiente y la lee hasta el final le doy un beso, porque la cosa se las trae si no eres yo.
 
He tenido un buen verano. No me puedo quejar. Uno de esos veranos en los que tienes la sensación de haber sacado jugo a la vida, de haber sido feliz. Y todo ello con pequeñas cositas, sin grandes viajes, ni gastos, ni ceremonias. Todo lo que me ha dado felicidad durante estos meses estivales han sido pequeños momentos que están al alcance de casi todos. Mi pareja, la familia, los amigos, leer, dormir, hacer fotos, pasear, correr, andar, la naturaleza, mis gatos, comer, reir...
 
Me he reencontrado con muchos amigos. Y eso es simplemente un lujazo.
 
A finales de julio, como pistoletazo de salida de mis vacaciones, con dos amigas de mi juventud a las que hacía muchos años que no veía e incluso con una de ellas apenas tenía contacto (ni por Facebook). Muchos son muchos, más de 10 en uno de los casos. Son personas muy importantes en mi vida, pero por motivos de simplemente dejadez llevábamos mucho tiempo sin tener relación. Son dos amigas que hice cuando me fui a estudiar a Madrid, o sea que fueron mi familia. Viví con ellas, en la resi y en el piso después. He ido a sus casas y ellas han venido a la mía. Hemos compartido confidencias, risas, llantos...Volver a encontrarnos fue genial. A pesar de que me puse super nerviosa antes de vernos. Como si se tratara de una primera cita. Después, pasó esa cosa mágica que pasa a veces con gente, que tienes la sensación de que te has visto la semana pasada.
 
He vuelto a ver, 15 años después, a un chico que formó parte de mi vida sentimental y de quién siempre he guardado muy buen recuerdo. Por suerte y gracias al Facebook llevábamos varios años en contacto, pero sin vernos porque vivimos muyyy lejos. Este verano pasé por su ciudad y tuve la oportunidad de reencontrarnos y tomarme una cerveza bien fresquita con él, mi chico y otros amigos...Genial.
 
He ido a una boda de dos amigas. Una compañera de mi último curro que se casó con su chica, a la que adoro. Con ellas dos estuvimos a principios de verano, un día después del encuentro con mis amigas de la carrera (fue un finde muy completo y repleto de sentimientos) y después volvimos a verlas ya para asistir al enlace.
En la boda me reencontré con amigos de Madrid, de mi extrabajo. A éstos hacía un año que no los veía, pero siempre que estamos juntos se me olvida todo, es un buen rollo el que tenemos que creo que genero endorfinas a tutiplén. Es gente con la que he convivido 10 años, 8 horas al día, por suerte he tenido compañeros de trabajo a los que ahora puedo llamar amigos de verdad. Si por algo me arrepiento de haber dejado mi curro es por ellos. No creo que vuelva a congeniar nunca tanto con nadie.
 
 
Sobrigato
Una amiga íntima, de Perripueblo, de las de toda la vida, estaba veraneando con marido y 3 hijas en el levante españó. A unos 100 km, era una buena oportunidad para hacerme una visita así que les invitamos a pasar casi dos días con nosotros, en la playa. Tiene 3 hijas y mi gata y mi sorbrigato las sufrieron. Pero me gustó mucho que nos visitaran, no habían venido nunca a verme y mis suegros, amable y resignadamente, aceptaron que se quedaran a dormir en casa, son unos santos. Yo pude conocer mejor  a las hijas de mi amiga, porque lo cierto es  que no sabía como eran, apenas las conocía y aunque hay algunas cosas que yo no lograba entender...(el mundo hijos-padres)...me encantó pasar ese tiempo con ellos. Aunque como dice un tío de mi chico con respecto a sus nietos:

- Qué alegría cuando vienen, y que bien cuando se van. ;-)

Y es que tres niñas agotan.
 
 
 
 
A finales del verano, la semana pasada en realidad, otra excompi del curro de Madrid, pasó por Perripueblo y por suerte yo estaba allí. Tuve la oportunidad de tomarme algo con ella, su pareja y su guapísima y encantadora niña. A ella sí que no la veía desde que me marché, la semana que viene hará 4 años ya, y me hacía especial ilusión el reencuentro. Es una persona muy especial. Buena gente, muy buena gente.
 


Escapaditas de verano. Pequeños perriviajes.

 
Yo en la montaña
Hemos hecho una escapadita. Nos fuimos a pasar 3 días a los pirineos, a Panticosa. Estuvimos en un hotelito pequeño, precioso, en un pueblo de montaña, verde y pizarra, respirando aire puro y disfrutando de la naturaleza. Hicimos una excursión de 7 horas, subimos a dos picos, en la que puse mi cuerpo al límite, al final incluso llegué a pasarlo verdaderamente mal, porque la bajada fue terrible y mis piernas ya no me respondían. Pero yo, que me tenía por una cagueta, una torpona, fui capaz de subir a dos picos, fui capaz de superarme a mi misma y eso y las vistas desde 2700 metros de alto compensan todo el dolor de cuerpo que tuve durante 4 días en los que  me dolieron todos y cada uno de los músculos, algunos no sabían ni que existían.
 
 
 
 
He estado en Perripueblo, en plan tranquilo y relajado, como siempre. Mañanas de piscina, hasta las 4 o más. Alguna tarde a correr, que hacerlo por allí es también un lujo (jejejeje, si no eres alérgico al trigo porque en plena cosecha mi chico no lo llevaba muy bien), he salido con los amigos, cañas por la tarde, fiesta y chuletillas en las bodega los findes, he estado con mis padres y mi hermano, hemos tenido una fiesta familiar de esas que apetecen y disfrutas y comes muchas cosas muy ricas, he ido a la capital de perripueblo de tapas, de museo, con amigos, a ver la catedral, a pasear y recrear la vista. Y me han dicho muchas veces, muchas gentes que estaba muy guapa, ¡¡eso mola mucho!! y te dan ganas de abrazar a todo el mundo.

 
 
Desde mi cama veía amanecer
Y he estado en la playa. En julio pasé una semana yo sola. En la playa compartimos la casa con mis suegros, (y con más familia, niños incluidos) durante el mes de agosto, pero la última semana de julio estuve yo, perrinovio venía por la tarde al salir de trabajar.
Salir a correr, leer, tomar el sol, pasear por la playa, ir a la pescadería a comprar boquerón fresco, cervecitas frescas a mediodía, irme a la cama prontito a seguir leyendo, relajarme, dejar de ver la tele, dejar de lado la vida...Eso es lo que hice. Y sienta de maravilla.

 
En agosto casi hice lo mismo, y aunque a veces convivir con los padres de mi chico se hace, no complicado, ni duro, pero echas de menos estar a tu aire..., no me puedo quejar de nada. Sobre todo porque mi suegra hace unas sardinas saladas y unos boquerones y una ensaladilla para morirse, y solo eso ya me hacía feliz.
 
 
 
 
No he dejado de correr en todo el verano. He bajado el ritmo porque el calor y un poco la pereza no me permitían otra cosa, pero no he dejado de correr.
Perrisombra corriendo
 
 
No he trasnochado mucho. Apenas nada, los días en la playa era feliz pensando en el momento de irme a la cama con mi libro y dormirme con el ruido de las olas cuando me venciera el sueño. Me he podido dar algún caprichito gracias a que en el verano me ahorro ir a la compra, dos pantalones vaqueros, pitillos, que me quedan genial....está mal que lo diga, pero es que la alegría que da caber en unos pantalones de Stradivarius no tiene precio. Me he comprado una cazadora vaquera, que tenía unas ganas locas de tener una y mis sandalias, las que llevé a la boda.
 
He comido arroz, mucho arroz y muy rico. He tomado aperitivos deliciosos acompañada de buenos amigos.
He disfrutado con mi chico, hemos estado muy bien todo el verano. Hemos descubierto nuevas formas de ocio, nos hemos superado juntos, hemos reído mucho y nos hemos sentido muy felices de estar el uno con el otro.
 
 
 
La peña
El colofón a un verano así han sido, como siempre, las fiestas de Perripueblo. Y esta vez con 3 días de más para mí, que me crucé España en autobús, para poder estar  más tiempo con mis padres. Para disfrutar de ellos. Me encantó volver a estar en Perripueblo en los previos de las fiestas, hacía años que no iba en esos días, ayudar a los amigos de la peña (tengo una peña) con los preparativos, hacer el lomo para cenar el primer día (ya os contaré de la peña alguna vez), acompañar a mi madre al concurso de tortillas y...¡sentir que quería salir escopetada de entre tanta ama de casa!! y demás personas de perripueblo que participar en el concurso no, que ¡ ahí van a llevar ellas una tortilla!, pero ir a degustar ¡eso sí!, ¡las primeras!

 Las fiestas han estado pasadas por agua y me he vuelto con un poco de pena porque no he podido disfrutar al 100% de mis amigas. La lluvia no ayuda mucho. Pero eso sí, he sacado partido a mi chubasquero el que me compré para ir a la escapada pirenaica, pero que no llegué a necesitar.
 
Un verano perfecto. Estoy contenta.
Ahora, toca prepararse para el otoño. Esto es otro cantar. No porque no me guste mi vida, porque creo que Anita tiene mucha razón en este post, pero yo en verano me he permitido parar, no pensar, no agobiarme, dejarme llevar y disfrutar que para eso me he pasado 10 años currando sin vacaciones en verano. Ahora ya no puedo seguir en ese estado de no hacer nada. Ahora toca pensar qué hago, o mejor dicho, toca echarle un par de huevos y hacer eso que pienso y repienso que podría hacer pero que no me atrevo a llevar a cabo.
 


Olimpia y sobrigato Neko en la siesta
 

6 comentarios:

  1. Me lo he leído todo. Me debes un beso.

    Me parece un plan excelente de verano. Me encanta. Mis veranos vienen regidos por los niños, pero me gustaría pasar más tiempo a mi aire, aunque todo no se puede...

    Besos.

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  2. Aaah, chuletillas en la bodega. Cuántos recuerdos... :)

    Yo también he tenido un verano parecido, relajado y poniendo la mente en hibernación, que hace falta de vez en cuando. Pensar demasiado cansa, en serio.

    Ánimo para el otoño y para esa decisión que tienes ahí pendiente.

    (Muy fan de tus gatos, son amor los dos...)

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  3. Verano completo de reencuentros eh! xD qué bien! ♥
    Pues oye me ha gustado leerlo todo. Yo no tengo apenas cosas que contar de mi verano xD se me ha pasado rápido e_e ya la semana que viene empiezo a estudiar otra vez y es como AHHH! xD
    Espero que te animes a darle caña a la idea que llevas en mente ;)

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  4. Apúntame un beso.

    Amorgatuno. En serio.

    Y oye, que me alegro del "desconecte", te lomereces. Mucha fuerza para el otoño que viene.

    Bettie J.

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  5. MUAKSSS,MUAKSSS,MUAKSSS,MUAKSSS...Y REQUETEMUAKSSSS.

    Todo no se puede Ro, es cierto. Y menos cuando hay hijos pequeños. Ya sabemos que ellos mandan y que cambian realmente la vida, pero también sabemos que es posiblemente la mejor aventura que podemos vivir.

    Las chuletillas en bodega son un placer que todo el mundo debería experimentar varias veces en la vida.

    A mi gata, Olimpia, le debo una entrada.

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  6. A mí también me debes un beso! Me lo he leído todo y me ha gustado mucho leerte tan feliz :)

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